Francia «toma nota» del acuerdo de compensación entre el fabricante de submarinos Naval Group y Australia que permitirá reactivar las relaciones con Canberra, declaró el sábado el ministro francés de las Fuerzas Armadas, Sébastien Lecornu. «Tomo nota de que este acuerdo le conviene a Naval Group (…) este acuerdo es importante porque nos permitirá abrir una nueva página en nuestra relación bilateral con Australia y mirar hacia adelante», dijo el ministro a periodistas en Singapur, luego de una crisis diplomática de meses de duración provocada por la cancelación de un gigantesco contrato de 56.000 millones de euros para construir submarinos.

El ministro francés tenía previsto reunirse el sábado con su homólogo australiano Richard Marles, del recién elegido gobierno laborista australiano, al margen de la conferencia de seguridad Shangri-La Dialogue en Singapur.

“La amistad con Australia es preciosa. Que un gobierno en la historia haya faltado a su palabra no significa que tengamos que olvidar nuestra relación estratégica (…) Australia tiene un nuevo equipo en el poder, estamos encantados de poder trabajar con ella», subrayó el Sr. Lecornu. Francia y Australia habían firmado en diciembre de 2016 un gigantesco contrato de 56.000 millones de euros para el suministro de 12 submarinos convencionales, derivados de los futuros submarinos nucleares franceses Barracuda.

Pero en septiembre de 2021, el exprimer ministro Scott Morrison anunció que su país iba a adquirir submarinos de propulsión nuclear como parte de la nueva asociación Aukus con Estados Unidos y Reino Unido, que cancela el contrato francés. París había denunciado «un golpe en la espalda» y llamado a su embajador, abriendo una crisis diplomática.