Que vivan los novios ! El jueves 9 de junio, luego de cinco años de relación, Britney Spears y Sam Asghari se dieron el “sí” durante una ceremonia organizada al final del día en la casa de la cantante de 40 años en Los Ángeles. Según la revista «Gente», cerca de sesenta invitados se reunieron bajo la gran carpa instalada en el jardín del inmueble para la ocasión. Y podemos decir que para este día tan especial, Britney Spears había visto las cosas a lo grande. Como Cenicienta, había entregado… un caballo blanco y un carruaje a juego.
En el lado de los invitados, estuvieron varios amigos famosos de la estrella del pop: Paris Hilton junto a su marido Carter Reum y su madre Kathy, Drew Barrymore, Maria Menounos o Donatella Versace que confeccionó el vestido de la novia.
Un matrimonio algo interrumpido
La que está al frente de la casa italiana Versace también ha revelado que le dio “mucho placer” crear este vestido a medida. “Les deseo lo mejor, ambas son tan hermosas. Estoy muy feliz por ellos”, dejó caer al micrófono de “Access Hollywood”, mientras se dirigía a la boda de su amiga de toda la vida. Por otro lado, los hijos de Britney Spears, Sean (16) y Jayden (15), no asistieron a la boda, según anunció su padre Kevin Federline, a través de un comunicado de prensa. Otros ausentes: los padres de la cantante y su hermana Jamie Lynn, de quien se ha distanciado desde el levantamiento de su tutela.
Lamentablemente, el feliz acontecimiento se vio truncado por la irrupción de Jason Alexander, el primer marido de Britney Spears. El estadounidense de 40 años fue arrestado luego de irrumpir en la casa de su exesposa horas antes del inicio de la ceremonia.
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