Está claro que el éxito del Hyundai Tucson es merecido. Con su atrevido frontal, su estilo agresivo, su generosa habitabilidad y sobre todo su pletórico equipamiento, la Hyundai Tucson Hybrid 230 tiene suficiente para satisfacer la mayoría de los usos. En el día a día, a pesar de su tamaño, sabe estar relativamente sobrio en un entorno urbano. Sin embargo, no está libre de defectos. Además de una ergonomía ligeramente sobrecargada, su consumo sube un poco rápido en carretera y su hibridación podría optimizarse mejor con un forzado modo totalmente eléctrico. Además, su comportamiento en carretera es un poco torpe si lo manejas mal. Sin embargo, este SUV está destinado principalmente a viajes en familia o en pareja, tarea que cumple con honores, contrariamente a lo que podría sugerir su línea deportiva.
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